martes, 5 de enero de 2010

Abriendo la Cápsula del Tiempo...

EN realidad este post tendría que haber salido el 1 de Enero, pero me había tomado unos días para desenchufarme y la verdad no tenía muchas ganas de ponerme a hacer nada productivo. Además, quién se pone a hacer algo los primeros días de enero? Hay demasiada flojera en el aire...
Igualmente, estoy a 20 días de rendir, tampoco tengo mucho tiempo disponible. Sí, se vuelve un tanto angustiante, pero esperemos que termine rápido, y bien por supuesto...

En fín! Llegó el año que viene! Luego de la cena de año nuevo, después de saludar y todas las formalidades me escapé un ratito a abrir la señora caja. Lo primero que distinguí fueron 2 piedras de la montaña (como no, si era lo que mas pesaba y rodaba cuando uno la movía), algunas figuritas de chicles Bonky, papelitos de golosinas (consumía bastante azúcar ahora que me doy cuenta...), un Hieloco, un diskette bastante baqueteado que todavía no me animo a meterlo a la PC por las dudas si se queda enganchado, pedazos de arcilla de cuando iba a aprender Dibujo, la Agenda Mágica de Clarín sin pilas, un casette que aun no escuché, un billete de 10 pesos de mentira (esos que venían con los paquetes de pastillitas o caramelos), y 3 libritos para completar que venían con la revista. Ahora que recuerdo, creo que a mitad de año me cansé de llenarl la caja, por eso no tenía tantas cosas...

Rescatando de lo que escribí: cuando tenía 9 años medía 1, y algo (sin completar), pesaba 35kg. Para dentro de 10 años, iba a medir 1, 75m y pesar 35kg (?). Iba a estar estudiando Computación, Quería conocer personalmente a Matt Groening, me gustaría tener un skate que flote, e iba a poder conocer la luna y todos los planetas (??).

Evidentemente miraba muucha TV, pero fue gracioso acordarme de la forma en que veía las cosas en ese momento. Y sorprendentemente le pegué a la altura! Hubiera estado bueno tener la medida de ese momento para comparar...

Bueno, sólamente eso. Si tuviera que volverla a llenar ahora, le hubiera puesto más cosas, algunas fotos, cuadernos, diarios, etc.; Pero a fín de cuentas, no hace falta meter recuerdos adentro de una caja y cerrarla con cinta adhesiva para después recordar los viejos tiempos, con revolver un poco algunos cajones basta para comenzar a encontrar aquellas cosas que habíamos dejado olvidadas...
(Por dar un ejemplo, en el fondo del ropero, al lado de la cápsula encontré el álbum de figus de las Basuritas, que ni me acordaba aun tenía...)